Controversia Colonial...
Decida y escoja usted de cuál lado caer
antes de que se haga tarde…
Quizás debemos añadir algún comentario sobre el concepto del "Commonwealth" de los ingleses por el que pasaron varios países incluyendo Australia, Sur África, Canadá, en total son unos 54 países que han pasado o todavía son miembros de la mancomunidad inglesa, es un ejemplo del estadolibrismo más puro. Algunos políticos y leguleyos han interpretado, - erróneamente – el Commonwealth inglés, como el ELA-COLONIAL nuestro, o viceversa.
Aprecio mucho su explicación de la descolonización primero y
luego, - con la autonomía ya en mano, iniciar un serio proceso de
autodeterminación destinado a decidir bien sea el estado federado o la
república bajo términos negociados de tú a tú, en paz y amistad para beneficio
común de las partes. Hay que correr, gritaba uno, porque la independencia
quizás serán los mismos norteamericanos los que nos la engolan sin darnos
cuenta, visto los vientos que vienen desde Washington.
Es que solo así, plenamente autónomos y en un proceso
descolonizador, cumpliremos con todos los requisitos del Derecho Internacional.
Además, es clara la irrevocabilidad de la estadidad federada la cual representará
la eventual disolución de la puertorriqueñidad según fueron sembrando y
cosechando nuestros antepasados. Puerto Rico como estado 51, o 52, o con el número
que quieran propagandizar, definitivamente evolucionará en otro Hawái, sin el “Hawaii”
original ya castrado y desaparecido. Por su parte, la independencia por su
propia natura será lo que quieran los puertorriqueños, y sin tener ninguna
preocupación en cuanto a China, Rusia, Venezuela o Cuba puedan “quedarse” con
Puerto Rico. No se lo permitiremos a ninguno, ni a los mismos EE. UU. De hecho,
es probable que a los chinos ni les interese PR, siendo, en todo caso, mucho
más apetitosas para el intercambio comercial con Europa, Suramérica, África y con
los mismo EE. UU.
La prensa sobre asuntos de economía continuamente describe
las relaciones comerciales chínese con otros países. Van a pasos agigantados
por doquier en aparente solidaridad y cooperación y en beneficio recíproco
mediante el intercambio entre diversos grados de las economías de mercado,
según cada país. De paso, los chinos se mueven, gracias a Dios, sin necesidad
de una geopolítica imperial como han hecho y hacen los EE. UU. Por ejemplo, sabemos
que no existe en todo el planeta Tierra una sola base militar China fuera de la
China misma, mientras que los Estados Unidos navegan por el mundo geopolítico manteniendo
unas 800 bases militares en 70 países. Rusia, Inglaterra y Francia, entre las
tres juntas suman tan solo 30 bases militares al extranjero de sus confines.
Es absurda la política de Trump, y quizás ahora la de Biden,
comportándose con un solo ojo político y el otro cerrado, metiendo el Cuco en contra
del intercambio comercial con China. Mientras, en verdad, los más grandes
burgueses y los verdaderos capitalistas norteamericanos y no tan solo, ven en
china una eficiente fábrica del mundo a bajo costo, fábricas que en cantidad y
calidad productiva no tienen nada que envidiar y que el gran capitalismo USA,
europeo y mundial tienen limitadamente por razones que aquí no vienen al caso. El desenfrenado capitalismo extremo occidental tiene urgente necesidad de seguir engordando por no decir enriqueciéndose, esa es su naturaleza, así
que no tienen más alternativa que entrar en Oriente y recurrir a la gracia de los chinos.
Recordemos que el capitalismo es una religión con su propio dios dólar
todopoderoso, un dios que va por encima del patriotismo más puro y más
nacionalista, siendo precisamente eso uno de sus pecados "capitales".
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