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JOSÉ DANIEL FERRER, SIN DUDA UN EJEMPLO A DOBLE SENTIDO…



E
n las últimas dos semanas, familiares del opositor cubano José Daniel Ferrer han estado reclamando en redes sociales información acerca del paradero y estado de salud. Ferrer es el coordinador general
del movimiento Unión Patriótica de Cuba y había salido de prisión en abril de 2020 para cumplir los cuatro años restantes de su condena en detención domiciliaria.

El hermano de Ferrer, Luis Enrique Ferrer, quien se encuentra en la ciudad de Miami y mantiene comunicación con sus familiares en Cuba informó a CNN de la detención del opositor y la falta de comunicación desde que, según indican, fue detenido por autoridades cubanas el 11 de julio pasado.


El 18 de marzo de 2003, José Daniel Ferrer fue detenido por ser uno de los principales promotores del controversial Proyecto Varela que, según se alega, al no cumplir con todos los requisitos y alteración de firmas y affidavits que eran requeridos. Siempre en el 2003, fue uno de los 75 presos detenidos en lo que se conoce como la Primavera Negra de Cuba, y fue condenado a 25 años de prisión. Las condenas aplicadas a Ferrer estaban basadas en la Ley No.88 de protección de la independencia nacional y la economía de Cuba, típica a todos los países que condenan seriamente el sabotaje y la traición.


Ejemplos del poder policiaco y de la aplicación penal de los estados y gobiernos son muchos. Con un par de casos basta, aunque sin hacer ningún tipo de paralelismos del contenido y la sustancia de las motivaciones de cada cual. Por ejemplo, William Bruce Mumford, quien fue condenado por traición y ahorcado en 1862 por tan solo derribar una bandera de Estados Unidos durante la Guerra Civil estadounidense. El ex vicepresidente Aaron Burr fue juzgado en 1807 por traición por "presuntamente" conspirar para instar a algunos estados a abandonar la Unión Federal como parte de aventuras militares para apoderarse de tierras de España y México. Otro ejemplo cuando se presentaron con éxito acusaciones de conspiración sediciosa en otro asalto al edificio del Capitolio en 1954 a cuatro activistas puertorriqueños a favor de la independencia cuando se apresuraron al edificio y abrieron fuego en el piso de la Cámara, hiriendo a varios representantes. Ellos y más de una docena de personas que "ayudaron" en el ataque fueron condenados por conspiración sediciosa. Todavía más, Oscar López Rivera, exlíder de un grupo independentista puertorriqueño que acusaron sin mayores evidencias de orquestar una campaña de bombardeos que dejó a decenas de personas muertas o mutiladas en las décadas de 1970 y 1980, pasó 35 años en prisión por conspiración sediciosa. Para añadir al mejor ejemplo, tan solo digo su nombre: Pedro Albizu Campos.

En general, todos los gobiernos mantienen leyes consideradas rigurosas contra la traición y la insurrección, y las aplican con rigor. Es el poder policiaco del estado reclamando su autodefensa en cualquier contrato social entre gobierno y el pueblo. Cuba no es excepción. La ley cubana en particular tiene como finalidad tipificar y sancionar aquellos hechos dirigidos a apoyar, facilitar, o colaborar con los objetivos de la Ley "Helms-Burton", la del bloqueo y la de la guerra económica contra el pueblo cubano, encaminados a quebrantar el orden interno, desestabilizar el país y liquidar al Estado Socialista y la independencia de Cuba, como objetivo principal de los enemigos del gobierno revolucionario. Esa es la ley en Cuba que se alega Ferrer violó repetidamente. No obstante que la fiscalía cubana ha pedido contra Ferrer la pena de muerte, le fue propuesto por las autoridades cubanas que si aceptaba irse de Cuba no sería fusilado, la máxima pena por traición. Ferrer no aceptó irse a Miami y que sepamos hasta ahora no ha sido fusilado, quizás reencarcelado por violar el arresto domiciliar.

Hay que reconocer a Ferrer que, con tanto valor, sacrificio y coraje de hombre vertical, ha optado por quedarse en Cuba luchando por sus ideales, yo añado, aunque sus acciones sean legales o ilegales en aquel país. Haciendo así, Ferrer ha dado un ejemplo de su coraje, verticalidad, y coherencia, siendo él mismo con sus acciones una crítica viva dirigida a los cubanos emigrados y escapados de la Revolución, quienes contrario a Ferrer, abandonaron el país corriendo a meterse bajo el fondillo del Tío Sam, demostrando, sobre todo, una gran incoherencia en la llamada lucha anti Revolución, anti Comunista, anti Fidel.

Es de indignarse ante la ignorancia cuando algunos en las redes sociales  al defender la independencia de PR y residiendo afuera de la Isla, oponentes gritan: "desde afuera es fácil váyase a luchar a PR".  Peor aun cuando le gritan por defender la revolución cubana "vete pa´ Cuba". ¿Me pregunto qué le gritarán a los cubanos exiliados contrarrevolucionarios, "desde afuera es fácil" o "vete pa' Cuba?

Ya son más de 20 años que Ferrer ha protagonizado, justa o no, su lucha en contra de la revolución mediante numerosas protestas, huelgas de hambre en prisión y fuera de ella, en ocasiones en reclamo propio y en muchos otros casos reclamando derechos de terceras personas. Confieso que no he leído la sentencia del 2003 pero si es verdad que el llamado "régimen fidelista asesina y reprime sin piedad y sin "más ni na", pues entonces no hay razón a tales críticas, ni explicación más detallada que el caso Ferrer.


En el último periodo Ferrer es el coordinador general del movimiento Unión Patriótica de Cuba y había salido de prisión en abril de 2020 para cumplir los cuatro años restantes de su condena en detención domiciliaria. Desde ese entonces se alega ha sido detenido y liberado en otras oportunidades, según la CNN. Se trata de una historia de verticalidad y coherencia de parte de Ferrer contra la revolución y contra aquellos que se fueron escapando en aquel momento histórico. El caso Ferrer, además, hace evidente la contención y moderación del gobierno cubano,  desmintiendo la acusación de un pueblo bajo la represión asesina, criminal y sangrienta.








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